El puente de Londres está caído
El monarca con el reinado más largo del Reino Unido, de 96 años, murió en Balmoral. La bandera sindical en lo alto del palacio fue izada a media asta a las 18:30 BST y afuera se publicó un aviso oficial anunciando la muerte.
La familia real ha entrado en período de luto. Se cancelarán los compromisos oficiales y las banderas sindicales ondearán a media asta en las residencias reales, los edificios gubernamentales, en las Fuerzas Armadas y en los puestos del Reino Unido en el extranjero.
Durante su reinado había visto a 15 ministros, comenzando con Winston Churchill y terminando con la señora Truss.
Nació el 21 de abril de 1926. Fue la primera hija de Alberto, duque de York. Su padre no era rey cuando ella nació. Pero mostró un sentido de responsabilidad hacia la monarquía desde muy joven. Tras la abdicación del rey Eduardo VIII en 1936, el padre de Isabel se convirtió en el rey Jorge VI y ella se convirtió en heredera.
En 1947 se casó con Philip Mountbatten, primo lejano, que se convirtió en duquea de Edimburgo.
Tenía 25 años cuando su amado padre, el Rey, murió en enero de 1952.
Cuando subió al trono el 6 de febrero de 1952, se convirtió en presidenta de la Comunidad y reina de siete países (Reino Unido, Canadá, Australia, Nueva Zelanda, Sudáfrica, Pakistán y Ceilán). Comenzó una nueva era isabelina.
Ella comprometió su vida al servicio. Heredó y dedicó su vida a la Corona. Para ella, la familia vino después de la monarquía. Era una madre distante pero amorosa, el príncipe Carlos se ocupaba de los niños la mayor parte.
Isabel reformó la monarquía para esta época menos deferente, interactuando con el público a través de paseos, visitas reales y asistencia a eventos públicos.
A pesar de las opiniones de muchos funcionarios, apareció en televisión. Ella creía que debería haber integración con la gente diciendo “tengo que verme para creerme”.
Gracias por el servicio que brindaste reina...